Vistas de página en total

sábado, 30 de octubre de 2010

LARA FABIAN: El poder de la voz y de la música

No sé si les pase a menudo, pero muchas veces cuando escucho una canción, sin importar el idioma en el cual sea interpretada, afloran en mí una serie de emociones difíciles de describir. Claro que esta situación no siempre se da. En una entrada anterior, les presenté al excelente cantante norteamericano Josh Groban, uno de los que logra con sus interpretaciones transportarme a emociones propias o cercanas que en algún momento me han acompañado.
Sin embargo, existen algunas particularidades muy propias del alma femenina que sólo pueden ser entendidas por otra mujer y creo que por ello, todas tenemos alguna cantante favorita que con inteligencia y perspicacia logró decir aquello que quisimos pero no pudimos o no supimos expresar con las palabras adecuadas. Un ejemplo de ello lo tengo en mi madre, mi abnegada Teresa, admiradora de Barbra Streisand y su maravillosa Woman in love (Mujer enamorada).
Pensando en nosotras y tomando de partida a aquellas mujeres que nacieron con el talento para conmovernos por medio de la voz, quiero compartir tres canciones, magníficamente interpretadas por Lara Fabian (belga nacionalizada canadiense) y colocadas en un orden muy personal.
La dolorosa ruptura
“Je Suis Malade” (letra de Serge Lama y música de Alice Dona), transmite los sentimientos más desgarradores de una mujer ante el abandono por parte del ser amado, al cual ella le ha entregado todo y cuya indiferencia le recuerda etapas tristes del pasado.

Yo estoy mal
Ya no soñaré más
No más humo
Tengo aún más la historia
Estoy sola sin ti

Como un huérfano en un dormitorio
Ya no tengo envidia
Para vivir mi vida
Mi vida se detiene cuando tú te vas
Tengo más vida
Incluso mi cama
Llega a la estación del muelle
Cuando tú te vas
Estoy mal, completamente mal
Al igual que cuando mi madre salió en la noche
Y me dejó sola con mi desesperación
Estoy mal
Perfectamente paciente
Tú nunca sabes cuando llegas
y reapareces quié
n sabe donde
ya llevo casi dos años
que te preocupa loco
Como una roca
Como un pecado
Estoy atada a ti
Estoy cansada, estoy agotada
Para pretender ser feliz
Cuando están allí
Yo bebo cada noche
Y de hecho ya todos los whiskys
Para mí saben igual
Y todos los barcos llevan la misma bandera
No sé hacia dónde va todo el mundo...
Estoy mal
completamente mal
Le pago con mi sangre a tu cuerpo
Y me siento como un pájaro muerto
mientras tú duermes
Estoy mal
Perfectamente paciente
tu convertiste en privadas todas mis canciones
convertiste en vacías todas mis palabras
Todavía tenía talento antes de tu piel
Este amor está matándome
Y si continúa así, acabará solamente conmigo
Y yo como un niño idiota
Cerca de mi radio
Mientras escucho mi propia voz cantar
Estoy mal
completamente enferma
Al igual que cuando mi madre salió en la noche
Y me dejó sola con mi desesperación
Estoy mal
Eso es lo que estoy mal
Tú convertiste en privadas todas mis canciones
convertiste en vacías todas mis palabras
Y mi corazón completamente mal
Lleno de barreras
Tú me entiendes... Estoy mal

El perdón necesario
“Broken Vow” (Lara Fabian y Walter Afanasieff), la amada al enterarse de la infidelidad del amado, desea saber cómo es su rival y decide resignarse ante la partida, quedándose con los recuerdos de lo que tuvieron.

Dime su nombre, quiero saber
cómo luce y a dónde vas
necesito ver su rostro, necesito entender
porqué tu y yo llegamos al final
Dímelo de nuevo, necesito oír
quién quebró mi fe en todos estos años
quién yace a tu lado a la noche mientras yo estoy sola
recordando cuando era tuya
Te dejaré ir
te dejaré volar
¿por qué sigo preguntando lo mismo?
te dejaré ir, ahora que sé
cómo guardar, de alguna forma
,
más que una promesa rota.

Dime las palabras que nunca dije
muéstrame las lágrimas que nunca derramaste
dame tu caricia, esa que me prometiste que era mía
¿o se ha desvanecido para siempre?
Te dejaré ir..
te dejaré volar
¿porqué sigo preguntando lo mismo?
te dejaré ir, ahora que sé,
cómo guardar, de alguna forma,
más que una promesa rota
.
Cierro mis ojos
y sueño contigo y conmigo
y me doy cuenta
que la vida es mucho más que amargura y mentiras
Cierro mis ojos
Entregaría mi alma por abrazarte una vez más
Y nunca dejar que esta promesa termine
Te dejaré ir
te dejaré volar
ahora que sé porque pregunto “por qué”
te dejaré ir, ahora que sé
cómo guardar, de alguna forma,
más que una promesa rota.
La esperanza del amor
“Adagio” (Música de Remo Giazotto y letra de Lara Fabian), a pesar de las experiencias negativas anteriores, siempre guardamos la fe en el porvenir, es más, tenemos la seguridad que existe una persona especialmente predestinada para hacernos olvidar la tristeza y colmarnos de amor.
 
No sé dónde encontrarte
No sé cómo buscarte
Oigo tu voz en el viento
Te siento bajo mi piel
Con mi corazón y mi alma
Te espero
Adagio

Todas estas noches sin ti
Todos mis sueños te rodean
Veo y toco tu cara
Caigo en tu abrazo
Cuando llegue el momento, lo sé
Estarás en mis brazos
Adagio

Cierro los ojos y encuentro el camino
No es necesario para mí rezar
He andado muy lejos
He luchado muy duro
No hay nada más que explicar
Yo sé todo lo que queda
Es un piano que suena

Si tú sabes dónde encontrarme
Si sabes cómo buscarme
Antes de que esta luz se desvanezca
Antes de que pierda mi fe
Sé el único hombre que diga
Que mi corazón escucharás
Que toda tu vida darás
Que para siempre tú estarás

No dejes que esta luz se desvanezca
No, no, no, no, no
No dejes que me quede sin fe
Sé el único hombre que dice
Que cree
Hazme creer
Que nunca te irás
Adagio


No hay comentarios:

Publicar un comentario